CALIFORNIA.-La represión policial antes del amanecer en la UCLA se da en punto álgido de las creciente tensión en los campus universitarios de Estados Unidos, donde las protestas por la guerra de Israel en Gaza han provocado enfrentamientos entre estudiantes y con las fuerzas del orden.
Antes de entrar, la policía instó a los manifestantes mediante repetidos anuncios por megafonía a desalojar la zona de protesta, que ocupaba una plaza central del tamaño de un campo de futbol.
«Si no se retiran y permanecen en el campamento o en tiendas o estructuras no autorizadas (…) estarán infringiendo la ley y quienes decidan permanecer podrían enfrentar a sanciones», dijo la UCLA en una alerta a primera hora de la mañana, antes de que la policía cerrara el campamento.
Tras concentrarse en el campus durante horas, los agentes acabaron avanzando por la zona en filas empuñando porras mientras los manifestantes -algunos con cascos blancos- enlazaban sus brazos, intentando bloquear su avance.
Imágenes de televisión en directo mostraron a los agentes desmontando tiendas y desalojando el campamento, mientras los manifestantes detenidos permanecían sentados con las manos atadas a la espalda con bridas.
En los últimos días, los estudiantes se han concentrado o han levantado tiendas de campaña en decenas de centros de enseñanza para pedir un alto el fuego inmediato en Gaza y exigir a los centros que desinviertan de las empresas que apoyan al Gobierno de Israel. Muchos de estos, entre ellos la Universidad de Columbia de Nueva York, han recurrido a la policía para sofocar las protestas.
En la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) se oyeron decenas de explosiones durante los enfrentamientos, provocadas por las granadas aturdidoras que disparó la policía cuando se adentró en el campamento a primera hora de la mañana.
Los manifestantes, algunos de los cuales llevaban escudos y paraguas improvisados, intentaron bloquear el avance de los agentes con su gran número, mientras coreaban «que retrocedan» y hacían parpadear luces brillantes a los ojos de la policía.
Otros, en el lado opuesto del campamento, se rindieron rápidamente y se les vio alejarse con las manos sobre la cabeza escoltados por la policía.
Biden condena el «caos» y el «vandalismo» ante protestas estudiantiles
En las últimas horas, el presidente Joe Biden emitió un discurso en el que rechazó lo que considera «vandalismo», violencia, «discurso de odio» y “caos”.
Sin embargo, aseguró que su Gobierno defiende el derecho a manifestarse pacíficamente.
Las protestas violentas no son protegidas, las pacíficas sí
“Las protestas violentas no son protegidas, las pacíficas sí, va en contra de la ley cuando ocurre, destruir propiedades no es una protesta pacífica, va en contra de la ley, el vandalismo, romper ventanas, cerrar campus, forzar la cancelación de clases y graduaciones, nada de eso son protestas pacíficas”.
Ante las críticas por las acciones policiales para disipar las protestas que se extienden por diversos campus universitarios del país, incluidos los centros educativos más prestigiosos, como Harvard, Columbia y Yale, el mandatario insistió en que Estados Unidos no es una nación autoritaria que aplaste la disidencia.
«La disidencia es esencial para la democracia (…) Pero la disidencia nunca debe conducir al desorden. Somos una sociedad civil y el orden debe prevalecer, somos una nación grande, diversa, librepensadora y amante de la libertad», agregó el líder de la Casa Blanca.