En el marco de un debate con otros cuatro aspirantes presidenciales republicanos, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, dio a conocer sus ambiciosas propuestas en cuanto a seguridad fronteriza y lucha contra el tráfico de drogas. Durante el evento, DeSantis afirmó que «matará» a los narcotraficantes que intenten introducir fentanilo a Estados Unidos y que construirá un muro financiado por México si llega a la presidencia.
En un discurso enérgico, DeSantis enfatizó su compromiso de abordar la problemática en la frontera sur de Estados Unidos. Prometió declarar una emergencia nacional desde el primer día de su mandato para enviar militares a la frontera y frenar lo que él denominó como una «invasión» de migrantes.
«Voy a deportar a las personas que ingresaron ilegalmente, voy a construir el muro y voy a hacer que México lo pague, como prometió Donald Trump», declaró DeSantis.
También dijo planea imponer un recargo a las remesas que los migrantes envían desde Estados Unidos a México, utilizando esos fondos para financiar la construcción del muro.
Su enfoque agresivo en la lucha contra el narcotráfico y la construcción de un muro respaldado por México serán temas de debate y discusión en los próximos meses a medida que avanzan las elecciones presidenciales.
“Vamos a enfrentar a los cárteles, a las organizaciones terroristas y vamos a autorizar el uso de la fuerza letal. También tendremos operaciones marítimas de interceptación de los precursores químicos que llegan a México. Si alguien de los cárteles intenta traer fentanilo cruzando la frontera, será lo último que haga. Los vamos a matar”, sentenció.
Ron DeSantis, considerado durante meses como un posible sucesor de Trump, que lleva tiempo hundiéndose en los sondeos.
El político, famoso por sus posturas muy conservadoras en asuntos como el aborto, los derechos LGBTI y la inmigración, tiene un retraso de 45 puntos frente a Trump, según el sitio web que reúne encuestas RealClearPolitics.
El expresidente, adepto a las provocaciones, Donald Trump decidió celebrar un mitin este miércoles casi a la misma hora que el debate republicano y a apenas 18 kilómetros de distancia.
El lugar elegido, la ciudad de Hialeah, pegada a Miami, es un bastión republicano en el que más del 95 por ciento de la población se define como latina.
No creo que haya necesidad de participar en el debate, pues él (Trump) aventaja en las encuestas y va a ser nuestro próximo presidente», expresó la jubilada Yumari Sotolongo, asistente al mitin.
Un guiño más de Trump a la influyente comunidad hispana de Florida. En junio, justo después de su imputación en un tribunal federal de Miami, se dio un baño de masas en el restaurante Versailles, un lugar emblemático de la comunidad cubana en esa ciudad.
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